Pedro Perelman tiene 37 años. Si bien estudió en la Escuela Italiana Cristoforo Colombo, y después de eso, siguió la carrera de Diseño Gráfico en la UBA, su vínculo con el arte viene desde chico. “Mi viejo estaba muy relacionado con el ambiente. Así que yo empecé a pintar dibujar desde temprano, muy incentivado por él”.
Origen fue su última muestra y FASE el origen, quizás, de su camino. “FASE fue quizás el primer paso. Se trata de un movimiento que surgió a principios del 2000, como un colectivo de artistas-diseñadores que hacíamos de todo: al principio, una revista temática que nos nutrió de muchas cosas y nos dio un nombre; luego la animación, con un estudio en el que por más de 10 años produjimos contenidos para TV, videoclips, visuales y hasta música”.
“En Origen, las piezas indagan sobre los inicio de temas étnicos, sociales, del trabajo. Crean culturas imaginarias en las que se mezcla la realidad y el surrealismo. Son 15 telas aproximadamente de diversos formatos y una escultura en madera, que llama “Ramon, robot proletario”.
“Además de la pintura hago música electrónica, junto a Defi Gagliardo (miembro de FASE), desde hace mas de 10 años también. Y hace dos que armé KERMESSE, que es FASE más un gran amigo y gran productor: GURTZ”.
“No creo ser muy ritualista, pero sí sé que me gusta el orden para trabajar (y a veces el desorden). Generalmente hago mucho trabajo de pre-producción antes de los murales”.
“Tengo formas distintas de encarar un mural o una tela. A veces, simplemente la pulsión de pintar, sin ideas, simplemente voy armando historias. Y otras veces vengo con una data en el inconsciente que me tira para ese lado”.
“En general me alimento de viajes y experiencias para pintar, y de la música también, mucho. Me divierte probar materiales y herramientas nuevas. Creo que soy un artista bastante cambiante, inquieto, voy buscando mis formas y moviéndome constantemente”.
“Ruta de Murales es el proyecto que marcó mi 2016, un año lleno de viajes y movimientos. Pero creo que me falta mucho por hacer. Pintar en otros países es un desafío que me encantaría encarar y que todavía no hice. Pero no corro. Siento que todo se va dando de manera natural, como se dio hasta ahora”.